domingo, abril 26, 2009

Delincuencia selectiva.

No existe duda alguna, cuando se requiere trasladarse a distintos lugares en la ciudad de Caracas y llegar puntualmente a diversas citas; la más eficiente forma es utilizando los sistemas de transporte público; sea el Metro, los autobuses, las camioneticas o en algunos casos los taxis.

Esto puede evitar demorar horas en algunos de los enormes atascos a los que estamos acostumbrados en esta ciudad; además de despreocuparnos por ubicar donde estacionar el vehículo.

Sin embargo, existen ciertos riesgos de los cuales se deben estar muy atentos.

Una tarde de Lunes, después de concluir una visita a un cliente, tomé una camionetica que me llevaría a las cercanías de mi hogar.

Como es costumbre, la avenida estaba colmada de vehículos y el tránsito se hacía lento y pesado.

Usualmente, en otras circunstancias hubiese caminado las 4 cuadras que me distanciaban del Metro, pero no tenía prisa... había terminado mi trabajo por ese día y apenas eran las 4 y media de la tarde.

Varios minutos despúes, en el instante que la camionetica se detiene en un semáforo, ingresa un individuo portando un resplandeciente cuchillo de considerable dimensiones y con una voz muy ronca, comienza un parlamento que pareciera hubiese ensayado en múltiples ocasiones.

"Tranquilo chófer... que no atraco chófer... pira pa´lante..." (¡Madre susto!)

Traducción: Tranquilo chofer... yo no robo a los choferes. Continúa conduciendo.

"Tampoco atraco a viejitas ni viejitos ni ciegos..." (Al menos el tipo tiene cierta ética)

Cambia el semáforo. El chofer sigue su ruta mientras observa al individuo a través del espejo.

"Yo atraco a los que tienen cara de misiú y los que veo medio raros..." (Nada me salva... salío mi número).

Traducción: Yo solo robo a aquellos que tienen cara de extranjeros, y a los que mi acostumbrado ojo selecciona después un minucioso análisis científico.

"Portugueses, chinos, árabes... no los pelo y si se ponen Popy los corto..." (Yo no calificaba para ese conjunto, pero él no lo sabía)

Traducción: Portugueses, chinos, árabes... los atraco sin compasión y si ofrecen resistencia los ataco con el cuchillo.

Mientras caminaba por el pasillo de la camioneta observando rostros, le grita al resignado chofer:

"¡Dále chófer!".

Traducción: Chofer sigue conduciendo.

Pensé: Tantas camioneticas y este ladrón de poca monta viene a tomar ésta... ¡Que mala suerte!.

Un dama de avanzada edad que estaba sentada a mi lado me miraba fíjamente. Pensé...Voltea para el otro lado y deja de verme viejita, que me vas a delatar.

El delincuente pasa al lado mío, sigue hacia el final del pasillo. Pensé... ¡Me salvé!.

La viejita seguía con sus ojos fijos en mi rostro. Pensé... ¡Si señora tengo cara de musiú! . ¿Podría dejar de verme?.

Le hice un gesto con la mano y espabiló. Volteó el rostro. Pensé... está asustada y cree que me van a atracar.

Regresa el individuo... Se para en frente. Rápidamente hice un inventario de lo que le sería de valor. Pensé...Bueno le daré el poco dinero que tengo.

Me pregunta: "¿Qué hora es?".

Trato de no verlo directamente y le respondo lo más sereno posible: "Para ti.... son... un cuarto pá las cinco..."

Traducción: 4:45 p.m.

Pensé: Vió el reloj Timex... seguro que me lo pide.

Sigue su camino hacia la salida.

Exclama: "¡Aquí no hay nadie pá robá!. ¡Déjame aquí chófer que voy pá otra!". (Alivio...)

Traducción: ¡No robaré a nadie!. ¡Chofer frena la camionetica que voy a bajar de ella y tomaré otra!.

El chofer frena, el individuo guarda el chuchillo, se baja de la camionetica y se va caminando por medio de la avenida atestada de vehículos.

El chofer solo atinó a decir: "Ese tipo se mudó por que él atracaba en otro séctor..."

Algunos pasajeros abandonaron la camionetica en la parada siguiente, yo seguí sentado mientras pensaba cual sería la razón por la cual el delincuente no detalló mi rostro de "musiú"

.- ¿Será que la asimétrica barba resultánte de varios días de flojera matutina, ocultaba mis facciones?.

.- ¿Será que mi respuesta le dió otra imagen?.

.- ¿Sería suerte?. Es lo más probable...

Foto: Camionetica espera su turno mientras un par de chicas cruzan la avenida. Foto tomada con mi teléfono móvil.

domingo, abril 19, 2009

Cambio de profesión.

Todo el fin de semana...
Tres noches seguidas...
Estoy cansado...
Mañana a trabajar...

Tantos años que paso por esto y no escarmiento...

Y... ¿a qué se dedica usted?.

La próxima ocasión que un vecino, un amigo o un conocido me haga esta pregunta, responderé de manera tajante, con voz altisonante y sin vacilar: “soy proctólogo”...

Creo que esa será una buena manera, para evitar que ellos me soliciten favores.

Y es que apenas se enteran que mi profesión está relacionada con informática; vecinos, amigos y conocidos no dudan en solicitarme incontables favores, para que los ayude con su “computadora que no arranca”, “con la impresora que se atascó”, “con el virus que dañó la computadora”, “con el documento que se perdió”, “con la cámara que no se conecta al puerto USB”, “con la lentitud de la conexión a Internet”, etc, etc, etc...

Sinceramente, no me molesta apoyar a otros a tratar de comprender este impredecible medio de la informática; el tema es que un aparente simple problema, puede llegar a complicarse de tal manera que se convierte en un trabajo que consume días y noches.

En muchas ocasiones, es terriblemente complicado explicarle a una persona que no está acostumbrada a lidiar con los problemas tecnológicos, lo que sucede con su equipo y las causas de la demora en solucionarle su problema. Repito... su problema.

Afortunadamente, estan los virus informáticos ahí... disponibles y a mano, para atribuirles el 99,9 % de las fallas... Eso ahorra largas explicaciones.

El otro problema es que, los vecinos, amigos o conocidos, tienen la percepción que una persona que trabaja en informática sabe absolutamente de todo; en una condición sine qua non...

Para ellos no existen diferencias entre las tecnologías o especializaciones en determinadas áreas. Informática en un término que abarca desde el contro remoto del televisor, hasta los cohetes para el espacio.

El todopoderoso informático soluciona cualquier problema... Así que se te aparecen en casa, en el trabajo, en el lugar de recreación, en cualquier lado, con los más extraños casos o con las más descabelledas elucubraciones.

En el afán de ayudarlos, uno pierde horas que deberían ser de descanso o recreación, documentándose o búscando información para solucionar la falla o para descubrir que el individuo solamente quería saber si lo que piensa hacer es posible, antes de contratar a un técnico y pagarle...

Finalmente, y esto realmente si me saca de quicio, el informático no tiene vida propia; es un ser que dedica su vida íntegramente a su profesión, una especie de voto de castidad tecnológico ...

El siempre está disponible, y es como el agua... no se le niega a nadie... Por eso no es un inconveniente para él que toquen a su puerta cuando está comiendo, que lo llamen por teléfono cuando está emocionado observado su deporte preferido por televisión, que le envíen recados con sus hijos, que lo intercepten en medio de los pasillos del edificio cuando va apurado y retrasado al trabajo, emboscarlo en el ascensor del edificio para someterlo a un torturador interrogatorio o que se instalen en la sala de la casa a ver televisión mientras revisa el computador portátil que no enciende...

En fin, creo que si de ahora en adelante cambio de profesión y le menciono a mis vecinos, amigos y conocidos que soy proctólogo... ninguno de ellos tocará la puerta de mi casa para pedirme el favor de realizale un examen de próstata...

domingo, abril 12, 2009

Sol, arena, playa y caca.

La primera vez que observé esta toma satelital correspondiente a la desembocadura del Río Tuy en el Mar Caribe, quedé muy impresionado por la extensión que alcanza la entrada del río al mar.

Para aquel que desconoce la situación del Río Tuy y observe esta foto, posiblemente pensará que no hay nada anormal en ella, más allá de un delta algo turbio.

El Río Tuy nace a los pies del Pico Codazzi y desemboca en el Mar Caribe, despúes de recorrer 293 kilómetros. Durante su pausado recorrido atravesando la Cordillera de la Costa, va recibiendo los aportes de varios pequeños afluentes, y a su vez recolectando grandes cantidades de desechos industriales, agrícolas y domésticos.

La lista de afluentes incluye los ríos Guare, Tarma, Súcuta, Ocumarito, Caucagua y Guaire, siendo éste último quizá el de mayor aporte contaminante.

En Septiembre del 2007, coloqué una entrada en ésta bitácora donde describía la situación del Río Guaire, convertido en la gran cloaca de la ciudad capital.

Su caudal traslada toneladas de desechos generados en la gran urbe que, finalmente, son transferidos al Río Tuy.

Para aquel momento, también comenté sobre la existencia y ejecución de un ambicioso plan integral de sanemiento del Río Guaire, que promete culminar en el año 2014.

Recientemente, me topé con las declaraciones del viceministro de Agua del Ministerio del Poder Popular para el Ambiente, en la cuales menciona que “hemos logrado un 40 por ciento de los logros planteados".

Confieso que dicho porcentaje me ha impresionado, especialmente porque por fortuna o desgracia (aún no sé como definirlo) diariamente atravieso el Río Guaire por varias de sus intersecciones, y realmente no he notado mejoría en su estado.

Sinceramente, espero que este proyecto sea una excepción a la regla, que culmine exitosamente y que los 650 millones del Dólares previstos para la recuperación del Guaire, no se diluyan en sus aún contaminadas aguas.

Retornando al Río Tuy, quizá lo más terrible de su situación sea que sus millones de contaminados litros son depositados en litoral barloventeño, más específicamente en Boca de Paparo a escasos 5 kilómetros de Rio Chico y muy cerca de Higuerote.

Por años, esta zona ha sido paradero turístico de venezolanos y extranjeros, que buscan disfrutar de momentos de sol, arena y playa; muchos de ellos totalmente ignorantes de esta realidad.

Por los momentos, y los próximos años, dependeremos de poder de autopurificación del Río Tuy, que se incrementa con la llegada de la época lluviosa, para evitar que toda la inmundicia generada por fábricas, industrias, ganadería, agricultura y por nuestros retretes (pocetas) floten libremente en las costas Sur del Mar Caribe.

Referente al Río Guaire, ratifico lo que mencioné para aquella fecha... "solo me bañaré en el, semanas después que alguno de los políticos, representantes gubernamentales o contratistas, que aseguran su limpieza, lo haga y no sufra ninguna consecuencia en su salud".

Imagen: Obtenida a través de Google Earth.